Para soplar las botellas PET se utiliza aire comprimido a 40 bar. Cualquier presencia de aceite en el aire crea un peligro para la salud y afecta al sabor y olor de sus productos. Al mismo tiempo, el aire a 7 bar controla las válvulas y los actuadores para el soplado, llenado, taponado, etiquetado y envasado. El aceite presente en el aire se acumula en estos componentes, ocasionando atascos y paradas. Además, los instrumentos que expulsan continuamente aire contaminado con aceite pueden comprometer la calidad de los productos finales.